viernes, 13 de enero de 2017

Leyenda de Tanabata.


Había una vez un joven labrador. Un día, cuando estaba caminando hacia su casa se encontró una tela colgada en un árbol. ¡Era una tela maravillosa! La más bonita que el joven había visto en su vida. Así, pensando que alguien la había tirado allí cogió la tela y se la metió en su cesto. Había acabado de poner la tela en en el cesto, cuando alguien le llamó, y al girarse se sorprendió mucho al ver aparecer a una mujer muy hermosa que le dijo: Me llamo Tanabata. Por favor devuélveme mi 'hagoromo'.

El joven le preguntó: ¿Hagoromo? ¿Qué es un hagoromo?

Ella le dijo: El hagoromo es una tela que uso para volar. Vivo en el cielo. No soy humana. Descendí para jugar en aquella laguna, pero sin mi hagoromo no podré regresar. Por eso le pido que me la devuelva.

El joven avergonzado no pudo decir que él la había ocultado y le dijo que no sabía nada de esa tela.

Así, como no tenía el hagoromo Tanabata no pudo volver al cielo y no tuvo más remedio que quedarse en la tierra. Sin embargo, al cabo de un tiempo ella y el joven labrador se enamoraron y se casaron.

Al cabo de unos años, Tanabata, cuando hacía la limpieza de la casa, encontró el hagoromo, y entonces le dijo a su marido que tenía que regresar al cielo, pero también le dijo que había una manera de estar juntos. Si hacía mil pares de sandalias de paja y las enterraba en torno a un bambú podría subir al cielo. Tanabata le estaría esperando.

El joven se quedó muy triste y empezó a hacer las sandalias de paja.

Cuando había hecho 999 estaba tan impaciente fue a enterrarlas al lado de un bambú. En ese momento el bambú se alargó muy alto hasta el cielo.

El joven labrador subió por el bambú hasta el cielo, pero le faltaba sólo un poco para llegar. Era el par de sandalias que no había hecho, pero empezó a llamar a Tanabata. Y ésta le ayudó a subir.

Su felicidad no duró mucho porque en ese momento apareció el padre de Tanabata, al que no le había gustado que ella se casara con un simple mortal. El padre pidió al joven labrador que cuidara durante tres días sus tierras.

"Entendido.", respondió el joven.

Tanabata le dijo a su marido que su padre le estaba haciendo una trampa y que aunque tuviese sed no comiese ninguna fruta pues le ocurriría algo malo.

El joven se puso a cuidar las tierras. Pero la mañana del tercer día ya no podía aguantar la sed y sus manos se fueron hacia la fruta. En ese momento, del melocotón que había tocado empezó salir mucha agua convirtiéndose en el río "Amanogawa"

El joven y Tanabata quedaron separados por Amanogawa y ambos se convirtieron en estrellas, las estrellas Vega y Altaír. Desde entonces, la pareja con el permiso del padre, puede encontrarse sólo un día al año, el siete de julio.




Autor: Desconocido.





18 comentarios:

  1. Pilar, la historia es preciosa al igual que las imágenes que nos dejas...Me recuerda a los cuentos de hadas que leía de pequeña e intercambiaba con mis compañeras. Me he vuelto a sentir niña en tu espacio, amiga.
    Mi abrazo y espero que estés bien y muy animada en este nuevo año.
    M.Jesús

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  2. Pero que leyendas tan bonitas nos regalas siempre, me lo paso estupendo leyéndolas.Besicos

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  3. Una leyenda que no conocía, agradezco que las compartas. Las estrellas si que las conozco por la astronomía, el movimiento entre ellas es imperceptible si las miramos desde la Tierra. Forma parte del triangulo de verano en las cuales se une a Vega, Altair y la estrella Deneb. Hasta ahí llega mi modesta información. Un Besazo Pili y pasa un lindo día!!

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  4. Pilar, preciosa leyenda... suele suceder que muy cerca de alcanzar un meta cuya obtención debe ser con paciencia, llega la desesperación o sucumbimos a alguna tentación y ya no se logra. No somos buenos para la paciencia, la perseverancia y el sacrificio. Lo bueno que ellos quedaron en el firmamento.
    Un abrazo de leyenda, con cariño y mis mejores deseos para tu en este año bebé aún.

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  5. Tu blog es como entrar en el libro de Las Mil y una noches.
    Un beso.

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  6. Esta leyenda me ha encantado. Es muy linda.

    Besitos, querida amiga.

    Y muy feliz fin de semana.

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  7. ¡ Que bonita es ! Muchos besos Piruja.

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  8. Bonito cuento Piruja. Es bueno entrar y leerte para salir relajada de tu blog.
    Un fuerte abrazo.

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  9. Ves como no se puede mentir aunque sea por amor? luego todo termina mal. Pero bueno, la leyenda es preciosa y hay que tomar nota
    Un millon de besos para las dos

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  10. Una preciosidad de leyenda, muy imaginativa. Además, tiene enseñanza.
    Gracias por compartirla.

    Besos

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  11. Que leyenda mas bonita Piruja, el padre con su imposición ne dejo que fueran felices para el resto de sus días.

    Besos.

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  12. Linda, linda leyenda, como siempre Pirujiña, se pasa un rato súper agradable leyendo tus historietas, aunque a veces al final queda un sabor agridulce, por no poder cumplirse la felicidad, pero pasa también en la vida real y nos sirve para aprender a no dar un segundo mal paso.

    Me ha encantado como siempre. Te dejo mi gratitud y mi inmensa estima.
    Un abrazo y se muy muy feliz.

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  13. En ocasiones, siempre surgen impedimentos para lograr que el amor se alimente día a día y la pareja pueda permanecer unida.
    Pero, el que de verdad ama, de alguna forma tiene su recompensa ¡ya me conformaría yo con poder verlo una vez al año!
    Agradezco tus letras y, los comentarios que sigo recibiendo, me estimularán para que dentro de poco tenga que escribiros algo nuevo aunque, como te he dicho, no creas que dispongo de mucho tiempo.
    Cariños y buena semana.
    kasioles

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  14. ¡Qué leyenda tan linda! Por su vergüenza a decir que habia cogido la tela, tuvo que pagar un alto precio, pero por otro lado, si se la hubiese devuelto, nunca se habrían amado.
    Muchos besos

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  15. ¡¡Que bonito Piruja!! Me ha gustado mucho pues como siempre encuentras leyendas preciosas.
    No te mando un besito para no contagiarte mi resfriado, he estado muy pachucha y no quiero que tu lo estés.

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  16. Qué triste. http://diariodemivida8.blogspot.com.es/
    Besos. susana

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  17. ¡Con qué ilusión esperarán el siete de julio! Preciosa leyenda. Besitos.

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