sábado, 28 de marzo de 2020

Leyenda de la Cierva Dorada. (Leyenda Celta)


Cierto día en que Finn y sus compañeros regresaban con sus perros de una cacería en el monte Allen, una cierva se cruzo por su camino y todos corrieron tras ella. Pronto los perseguidores fueron quedando atrás , menos Finn y sus dos perros, Bran y Skolawn, estos perros tenían un origen muy peculiar ya que eran hijos de Tyren, tía de Finn, que había sido transformada en perra por un encantamiento, eran los mejores canes de toda Irlanda y Finn los amaba muchísimo. Cuando la cacería se dirigía hacia el valle, la cierva se detuvo, se recostó, y Finn vio que sus perros jugaban con ella lamiendole la cara, Finn ordeno que nadie le hiciera daño y ella los siguió en el camino de regreso.

Esa misma noche, el se despertó y vio junto a su cama a la mujer mas hermosa que vio en toda su vida con una larga melena rubia, quien le dijo:" Soy Saba, oh Finn, soy la cierva que cazaste hoy, a causa de no haber querido dar mi amor al druida de la tierra de las hadas, me convirtió en lo que has visto, llevo así ya tres años, uno de sus esclavos apiadándose de mi, me revelo que si podía llegar hasta vuestra morada de Allen, oh Finn, volvería a mi forma original, temía ser destrozada por tus perros, o herida por los cazadores, por eso solo me deje alcanzar por vos y por Bran y Skolwn, quienes tienen la naturaleza del hombre y no me harían daño". Así fue como Saba vivió con Finn y el la hizo su esposa, tan profundo fue el amor que se tuvieron, que durante meses no se separaron. Un día llego la noticia de que barcos de guerra del Norte estaban en la bahía de Dublin, así que el mando llamar a todos sus hombres y le dijo a su esposa:" Los hombres de Erín nos dan tributo y hospitalidad para que los defendamos de los invasores, seria una vergüenza aceptar los pagos sin dar de nuestra parte lo que se pide".

Durante siete días estuvo ausente Finn, hasta que los escandinavos se alejaron de las costas de Erín, al octavo día regreso entre los suyos, pero vio la preocupación en los ojos de hombres y mujeres, Saba no estaba en la muralla esperando su regreso, ante el pedido de Finn, le contaron lo que había sucedido: Saba esperaba ansiosa su regreso, y un día aparecio Finn con sus dos perros, hasta se escucharon las notas de la llamada de caza de los de la Fianna en el viento. Saba corrió hacia la verja a recibir a su amado, pero el falso Finn blandió una varita de avellano y la convirtió de nuevo en un ciervo, sus perros comenzaron a perseguirla haciéndola huir, los hombres tomaron todas las armas que pudieron y salieron en busca del hechicero, pero no encontraron a nadie, a Saba tampoco. Finn se retiro a su habitación donde permaneció un día completo, luego siguió ocupándose de los asuntos de la Fianna como siempre,  durante los siguientes siete años busco a Saba por cañadas, bosques y cuevas de toda Irlanda, con la sola compañía de sus fieles perros hasta que perdió toda esperanza y renuncio.

Un día mientras cazaba en Ben Bulban oyó que los perros ladraban con furia, el y sus hombres corrieron hacia ellos y encontraron que los canes intentaban acercarse a un niño de largos cabellos rubios, que estaba desnudo al pie de un árbol, mientras Bran y Skolwn los mantenían a distancia. Los fians apartaron a los perros y se llevaron con ellos al muchacho, que cuando aprendió a hablar, les contó su historia: El no había conocido ni padre ni madre alguna, siempre había vivido en el valle cerrado por acantilados altísimos y había sido cuidado por una cierva amorosa. Durante el verano se alimentaba de frutos silvestres y durante el invierno se mantenía con las provisiones que guardaba en su cueva, de tanto en tanto aparecía un hombre de aspecto oscuro que hablaba con la cierva, a veces con ternura y otras con amenazas, pero la cierva siempre huía de el. Un día el hombre llego y estuvo largo rato con la cierva, hasta que la toco con una varita de avellano obligandola a seguirlo sin mirar atrás, el niño intento ir tras ellos pero no pudo mover su cuerpo, llorando de rabia y desolación cayo al suelo y perdió el sentido, cuando volvió en si, estaba en la ladera de la montaña de Ben Bulban,  durante días busco aquel valle verde, hasta que los perros lo encontraron.

Finn comprendió en ese momento, que la cierva de la que hablaba el niño no era otra que su amadisima Saba, y que ese niño era su hijo, Finn le llamo Oisin (pequeño ciervo), se le conoció como guerrero y un gran compositor de canciones y fabulas.




20 comentarios:

  1. Me encanto la historia , a parte de que haya hadas por medio ya es el colofón ..Gracias Piruja siempre nos dejas esa magia de leyendas que nos hacen soñar y creer en ellos ..Un fuerte abrazo , y sigue cuidandote mucho ..muakk.

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  2. Preciosa esta historia.
    Bonito la hayas compartido.
    Cuídate.
    Un besito.

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  3. Muy triste el destino de Saba.
    Un gran abrazo fraterno.

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  4. Bonita leyenda aunque un poco triste.
    Saludos.

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  5. Hola Piruja.. Madre mia, que leyendas, son magníficas, un poco agridulces, como la vida misma, pero muy interesantes..
    Un abrazo..

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  6. Que leyenda tan bonita pero es una pena que no apareciera la cierva. Besicos

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  7. Preciosa leyenda celta, me ha recordado una película que me gusta mucho: Lady Halcon.
    Besos

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  8. Adoro las leyendas pero esta me ha tocado mucho el alma. Siento llegar tarde a tu espacio ahora no estoy mucho por aquí, tengo prioridades, por suerte estoy en la sanidad y ayudar a todos es mi trabajo amiga, cuídate mucho cielo.

    Besos!!

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  9. Que bonita historia nos ofreces Pili, cuanta ternura encierra este texto y aunque solo pudieron ser felices juntos poco tiempo, el fruto de ese amor es ese niño.
    Gracias por ofrecernos este ratito de tranquilidad leyendo esta leyenda.
    Besos y cuídate mucho
    Puri

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  10. Preciosa!!!
    Ten cuidaico Piruja y cuídate mucho, espero que tu y los tuyos estéis bien.
    Un abrazo.

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  11. Esta leyenda no la conocía y sinceramente me ha gustado mucho, es preciosa.
    Un abrazo virtual y desde 2 metros de distancia.

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  12. Creo que ya la habías puesto, pero me sigue gustando igual. Besitos y salud.

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  13. Hola Piruja!
    Que linda y triste a la vez tu fábula de hoy.
    Es estupendo volver a retomar viejas costumbres.
    Besos

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  14. No la conocia. Saludos y cuidate amiga.

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  15. Una leyenda con un final triste.

    Besos.

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  16. Una leyenda triste pero con un final entrañable, padre e hijo juntos al fin.
    Besos y cuídate Piruja

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  17. Hola Piruja, cómo estás? Feliz de pasar por aquí y leer tan linda y nostálgica historia, me gustó mucho tu pluma virtual.
    Te dejo un abrazo.
    Bendiciones.

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  18. Linda historia hace tiempo no pasaba por aquí. Te dejo un beso grande.

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  19. Preciosa la historia de la cierva, que tuvo que sufrir mucho vagando de un lado para otro. El hijo encontró a su padre y al menos pudo tener mejor vida que su madre. Triste historia que de nuevo nos hace pensar sobre la maldad de algunas personas, que someten a otras y les destrozan la vida.
    Mi abrazo y mi cariño, Pilar.

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