sábado, 15 de abril de 2017
Leyenda de la primavera
Hubo una época muy lejana en que la tierra solo conocía una estación, el invierno. El frío era intenso, la nieve cubría llanos y montañas y las plantas no tenían colores, eran rugosas y opacas.
Cierta vez los hombres partieron en busca de alimentos, que tanto escaseaban, y las mujeres se quedaron cuidando el fuego.
El cielo estaba oscuro, presagiaba tormenta.Y así fue. Un trueno y luego, el viento y la nieve.
Los días pasaban y los hombres no regresaban. Los niños lloraban por sus padres y los abuelos por sus hijos. Las mujeres trataban de mantener la calma para no generar más malestar.Una madrugada, cuando casi todos habían perdido las esperanzas, aparecieron en el horizonte los hombres.
Extenuados, muertos de frío, ni podían contar las penurias que habían pasado en las cumbres. Pero había algo...algo que no podía dejar de contarse. No traían con ellos a Sumac, un adolescente valiente y noble, que se había perdido en las nieves.
La madre de Sumac, desesperada, corrió a la montaña mientras sus pies se enterraban en la nieve. Se escuchaba su voz llamando a su hijo, "¡Sumac, hijo! ¡Sumac!" Y así se perdió de la vista de todos.
Avanzó y avanzó hasta quedar rendida. Fue cuando entonces oyó la voz de Sumac. La desesperación agudizó su ingenio y pudo rescatar al muchacho casi helado. ¿Adonde lo llevaría?. El viento le habló, diciéndole, "Sube con tu hijo a la montaña más alta y toca el cielo".
La madre, con Sumac en brazos, ascendió de una montaña a otra, y en otra y en otra más, pero el cielo estaba siempre tan alto... El viento insistía: "Sube con tu hijo a la montaña más alta y toca el cielo". De pronto, un remolino la envolvió dejándola en la cumbre de un cerro altísimo. La mujer, cayendo de agotamiento, tocó las nubes que se abrieron como una gran cortina. Un trozo de cielo del más puro celeste se fue agrandando.
De él brotaron los rayos de un sol radiante, y deslizándose por ellos salieron pájaros que poblaron la tierra de trinos y aleteos, mariposas multicolores llegaron hasta las plantas en busca de flores que acababan de nacer...El viento se transformó en suave y tibia brisa, se deshizo la nieve y el agua cristalina corrió en cascadas juguetonas.
Sumac volvía a la vida mientras su madre alzaba los brazos al cielo agradeciendo a Inti, el Dios de sus antepasados, el milagro de la primavera que nacía. Cuentan que desde entonces después del invierno llega la primavera como madre amorosa, para poner su nota de calor, belleza y colores en los campos helados de la tierra.
Autor: Desconocido.
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¡Guaaaoouu! Pero qué leyenda más hermosa. Ya me tenías con el corazón comprimido, cuando aparece la resolución mágica. Me encantó.
ResponderEliminarMuchos besitos de anís.
Una leyenda mágica y portentosa donde lo imposible se hace realidad palpable.
ResponderEliminarBesos.
Hola Pili!!!!
ResponderEliminarQué hermosa historia nos cuentas. Donde la desesperación y el amor por su hijo logra al fin su recompensa. Precioso cuento!!!!!
Un besote con mi cariño!!!!!
Hola amiga pero que preciosos relatos nos muestras son preciosos me gustan .Saludos y besos
ResponderEliminarOtra leyenda preciosa. Muchos besos.
ResponderEliminarHola Piru, buenas tardes,
ResponderEliminaraaaah, éstas son las leyendas que me encantan,
excelente desenlace.
Te deseo un lindo fin de semana
y... Felices pascuas!
un cálido abrazo
Una bonita leyenda y con un final feliz, me ha gustado mucho.Besicos
ResponderEliminarPreciosa la historia, lo imposible a veces es posible...
ResponderEliminarUn final de los que me gustan.
Un abrazo Piruja.
Bss!.
Que bonita historia.
ResponderEliminarEl poder maternal no debe subestimarse. Qué no haría una madre por su hijo?
Me ha encantado.
Besos.
Pllar, me encantó esta historia...Todo un símbolo de amor por parte de la madre y de la naturaleza, ambas salvaron a sus hijos del invierno yerto...Hoy, día de Resurrección, es toda una alegría ver esa esperanza entre lineas, como un presagio de vida y de paz entre el cielo y la tierra, amiga...Gracias por tus entrañables comentarios.
ResponderEliminarFELIZ PASCUA DE RESURRECCIÓN.
Mi abrazo y mi cariño siempre.
Una belleza de leyenda.
ResponderEliminarMe ha encantado.
Besitos grandes.
Que leyenda tan bonita, que no hace una madre por un hijo, creo que en nuestra naturaleza hay una fuerza sobrehumana cuando se trata de ayudar al fruto de tus entrañas.
ResponderEliminarUn besazo guapa!
Preciosa leyenda como siempre y preciosas imágenes.
ResponderEliminarUn beso.
No me ha sorprendido porque siempre cuentas maravillosas leyendas, además lo acompañas con unas imágenes preciosas.
ResponderEliminarSuerte que ha esta mamá le debemos la bonita primavera.
Un beso.
Hola Piruja , una leyenda muy bonita y con un final feliz , me gustan mucho tus leyendas , por cierto como estas , que tal has pasado la semana santa .
ResponderEliminarTe mando muchos besos amiga mía , besos de flor .
Qué bonita leyenda Piruja, me encanta el final, cuando la Primavera trae el amor, pues tenía que ser muy triste todo el año invierno. Un fuerte abrazo y buen fin de semana. @Pepe_Lasala
ResponderEliminarUna vez más, una preciosa leyenda en la cual lo imposible no existe.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Es muy lindo
ResponderEliminares bonita la historia
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