sábado, 24 de noviembre de 2018
Leyenda de la Cierva Dorada. (Leyenda Celta)
Cierto día en que Finn y sus compañeros regresaban con sus perros de una cacería en el monte Allen, una cierva se cruzo por su camino y todos corrieron tras ella. Pronto los perseguidores fueron quedando atrás , menos Finn y sus dos perros, Bran y Skolawn, estos perros tenían un origen muy peculiar ya que eran hijos de Tyren, tía de Finn, que había sido transformada en perra por un encantamiento, eran los mejores canes de toda Irlanda y Finn los amaba muchísimo. Cuando la cacería se dirigía hacia el valle, la cierva se detuvo, se recostó, y Finn vio que sus perros jugaban con ella lamiendole la cara, Finn ordeno que nadie le hiciera daño y ella los siguió en el camino de regreso.
Esa misma noche, el se despertó y vio junto a su cama a la mujer mas hermosa que vio en toda su vida con una larga melena rubia, quien le dijo:" Soy Saba, oh Finn, soy la cierva que cazaste hoy, a causa de no haber querido dar mi amor al druida de la tierra de las hadas, me convirtió en lo que has visto, llevo así ya tres años, uno de sus esclavos apiadándose de mi, me revelo que si podía llegar hasta vuestra morada de Allen, oh Finn, volvería a mi forma original, temía ser destrozada por tus perros, o herida por los cazadores, por eso solo me deje alcanzar por vos y por Bran y Skolwn, quienes tienen la naturaleza del hombre y no me harían daño". Así fue como Saba vivió con Finn y el la hizo su esposa, tan profundo fue el amor que se tuvieron, que durante meses no se separaron. Un día llego la noticia de que barcos de guerra del Norte estaban en la bahía de Dublin, así que el mando llamar a todos sus hombres y le dijo a su esposa:" Los hombres de Erín nos dan tributo y hospitalidad para que los defendamos de los invasores, seria una vergüenza aceptar los pagos sin dar de nuestra parte lo que se pide".
Durante siete días estuvo ausente Finn, hasta que los escandinavos se alejaron de las costas de Erín, al octavo día regreso entre los suyos, pero vio la preocupación en los ojos de hombres y mujeres, Saba no estaba en la muralla esperando su regreso, ante el pedido de Finn, le contaron lo que había sucedido: Saba esperaba ansiosa su regreso, y un día aparecio Finn con sus dos perros, hasta se escucharon las notas de la llamada de caza de los de la Fianna en el viento. Saba corrió hacia la verja a recibir a su amado, pero el falso Finn blandió una varita de avellano y la convirtió de nuevo en un ciervo, sus perros comenzaron a perseguirla haciéndola huir, los hombres tomaron todas las armas que pudieron y salieron en busca del hechicero, pero no encontraron a nadie, a Saba tampoco. Finn se retiro a su habitación donde permaneció un día completo, luego siguió ocupándose de los asuntos de la Fianna como siempre, durante los siguientes siete años busco a Saba por cañadas, bosques y cuevas de toda Irlanda, con la sola compañía de sus fieles perros hasta que perdió toda esperanza y renuncio.
Un día mientras cazaba en Ben Bulban oyó que los perros ladraban con furia, el y sus hombres corrieron hacia ellos y encontraron que los canes intentaban acercarse a un niño de largos cabellos rubios, que estaba desnudo al pie de un árbol, mientras Bran y Skolwn los mantenían a distancia. Los fians apartaron a los perros y se llevaron con ellos al muchacho, que cuando aprendió a hablar, les contó su historia: El no había conocido ni padre ni madre alguna, siempre había vivido en el valle cerrado por acantilados altísimos y había sido cuidado por una cierva amorosa. Durante el verano se alimentaba de frutos silvestres y durante el invierno se mantenía con las provisiones que guardaba en su cueva, de tanto en tanto aparecía un hombre de aspecto oscuro que hablaba con la cierva, a veces con ternura y otras con amenazas, pero la cierva siempre huía de el. Un día el hombre llego y estuvo largo rato con la cierva, hasta que la toco con una varita de avellano obligandola a seguirlo sin mirar atrás, el niño intento ir tras ellos pero no pudo mover su cuerpo, llorando de rabia y desolación cayo al suelo y perdió el sentido, cuando volvió en si, estaba en la ladera de la montaña de Ben Bulban, durante días busco aquel valle verde, hasta que los perros lo encontraron.
Finn comprendió en ese momento, que la cierva de la que hablaba el niño no era otra que su amadisima Saba, y que ese niño era su hijo, Finn le llamo Oisin (pequeño ciervo), se le conoció como guerrero y un gran compositor de canciones y fabulas.
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Ah que bonita y triste leyenda..... Me quedo pensando que seria de la cierva.... y que lindo que al menos encontró a su hijo. Un gusto leerte...saludos
ResponderEliminarUna de las buenas leyendas que nos sueles traer, da miedo pensar el triste destino de la cierva tras dejas al hijo.
ResponderEliminarBesos.
Hola Piruja cielo aquí llego en la mañana para leer esta leyenda preciosa un poco triste se queda una y las leyendas casi siempre hay un final feliz al menos tenia a su hijo feliz día tesoro perdona mi tardanza trato de vivir los días mas que antes, y apenas estoy escribir lo hago en nada gracias por estar feliz día feliz finde besitosssssssssssss
ResponderEliminarPreciosa leyenda. Los ciervos son uno de los animales que más ternura me producen. Bonita historia, me recuerda la película de Lady Halcón.
ResponderEliminarLeyenda y realidad... Gracias, Pili por este relato.
Te deseo un maravilloso día.
Besossss
Muy bella leyenda y muy tierna siervita aunque un poco triste, pero en fin la vida es así. Fue un placer leerte. Un abrazo feliz fin de semana.
ResponderEliminarMuy bonita leyenda, pero como siempre muy triste, me voy a dedicar a buscar una que termine con un final feliz, algo así como "Se casaron, fueron felices y comieron perdices"
ResponderEliminarAbrazos, la escoba solamente la utilizo yo y esta mañana estábamos a 3 bajo cero, ahora a 5 positivos.
Hermosa leyenda,cariños.
ResponderEliminarPero qué cosa más bonita xd, es tierna , amorosa , me ha hecho sentir a esa cierva cuidando de su bebé ..me encanto muchisimo .
ResponderEliminarGracias Piruja por traernos estas lindas historias .
Abrazos a montones muakk.
Preciosa leyenda,donde la magia y la naturaleza son protagonistas...La cierva nos ha enamorado a todos y no es la primera vez que los animales cuidan a los niños, se ha dado en otras ocasiones. En este caso ella era la madre, el instinto maternal es poderoso.
ResponderEliminarMi gratitud y mi abrazo por tus bellas historias, Pilar.
Feliz finde, amiga.
Otra bonita leyenda. Muchos besos.
ResponderEliminarLos ciervos deben tener mucho de mágicos. Eso me parece al verlos.
ResponderEliminarMuy buena historia.
Recibe un gran abrazo.
Haces que me vuelva niña leyendo tus cuentos.
ResponderEliminarBonita historia Piruja
Un beso.
Hola Piruca.. Preciosa leyenda celta me ha encantado como lo narras, Oisín, hijo de Fionn Mac Cumhaill y de Sadbh, es recordado en las leyendas como el más grande poeta de Irlanda, y de la mitología irlandesa.
ResponderEliminarUn abrazo..
Que leyenda más bonita, me ha encantado leerla Piruja.
ResponderEliminarUn abrazo y buena semana.
Muy buena y hermosa leyenda.
ResponderEliminarUn beso.
Muy feliz semana .
🌻🌻🌻🌻🌻🌻
Otra más de las preciosas leyendas que compartes con tus lectores. Es una historia muy tierna y emotivo el comportamiento de la cierva. Un abrazo.
ResponderEliminarComo me gustan tanto los cuentos,este me ha parecido tan tierno y bonito como los que leía de pequeña
ResponderEliminarMe encanta que nos traigas tantas cosas bonitas .Así recordamos,así meditamos también
Besucos
Gó
Muy buena historia Piruja, los ciervos yo los veo como muy tiernos, unos seres especiales, con mucho encanto.
ResponderEliminarUn placer leerte.
Feliz semana amiga.
Un beso
Ojalá tus palabras y buenos deseos lleguen al cielo.
ResponderEliminarYa sólo confío en que Dios le tienda su mano y le ayude a remontar.
Disculpa que hoy no lea tu entrada, desde esta mañana que he hablado con los suyos y me han dado la noticia, no tengo ganas de nada.
Te dejo un fuerte abrazo.
Kasioles
¡Hola Piruja!
ResponderEliminarEs una leyenda hermosísima y llena de ternura, siempre entregas lo mejor, tienes muy buen gusto para escoger historias que son un verdadero placer leerlas, gracias, reina.
Me ha encantado pasar por esta tu casa, donde se respiran las mejores fantasías.
Te dejo mi inmensa gratitud y gran estima.
Un abrazo y ten un bonito fin de semana.
Me fascinan los cuentos, este es precioso!! los ciervos me parecen animalitos tiernos, llenos magia y encanto.
ResponderEliminarSalgo encantada.
Saludos.